viernes, 12 de diciembre de 2008

LOS REYES NO SON NEGROS DON BERNAT

Esta mañana me he sorprendido (nunca dejo de sorprenderme) con el articulo de opinión de Bernat Joan i Marí (diario de Ibiza 12/12/08) titulado Xovinisme hispànic antiamericà, leedlo no tiene desperdicio pero volved de nuevo al Blog.

En España han habido reyes de todos los pelajes, con sangre altamente diversificada en aquellos contubérnicos tiempos medievales, pero rey negro negro lo que se dice negro, aparte de Baltasar, no recuerdo ni creo, aunque tampoco conozco ningún rey Batusi blanco en el Kilmajaro. Catalán si, los actuales reyes de España descienden en su colateral aragonés del mismísimo rey Jaime I que a su vez era primo del rey de Castilla y sobrino del de Portugal… es igual, el sistema de gobierno español lo tememos consensuado todos en una Constitución, incluidos usted y yo que no somos monárquicos lo que implica bien poco… siempre tendríamos la posibilidad de ligarnos a una infanta, se lleva mucho en estos tiempos.

Eso es como yo cuando era joven y presumía fuertemente de no ser europeo por mi nacimiento en Ibiza, verdadero microcosmos violado por los catalanes en su famosa conquista que no reconquista, mil veces dominada por sus vecinos pero jamás reducida... del todo. Menos mal.

Los humanos somos animales de costumbres y siempre queremos que resplandezcan las nuestras, es lo que se llama virus endogámico. Sería posible que en Ibiza ciudad llegara o llegase hasta la alcaldía un foráneo peninsular o alemán pero lo veo ‘raro raro’ y seguro que en los cuatro restantes municipios ni tan siquiera se otea la posibilidad: Un alcalde ‘Murciano’ ¡jamás! antes alemán -diría un colega que tenemos don Bernat y yo en Sant Joan de Labritja-.

Sin embargo si me imagino un presidente catalán negro pero eso si con nivel C o Z que será el más elevado, al fin y al cabo ya tienen uno andaluz que no pierde la pinta ni el nivel.

En estos globalizados tiempos yo entiendo que los nacionalismos debieran colgarse en una percha con todos los istmos, así España acabaría siendo una gran ínsula baratárica que no necesitaría ni nombre, como Dios, seríamos la innombrable y por descontado seccionada, aun así sería imposible escaparse pues no tendríamos nexos foráneos ni istmo que nos desvirtuara, tendríamos que interferirnos a banderazos, como siempre y es que ‘semos asina, pardus comu la tierra’… Per aixó dic viva al Noi del Sucre, don Salvadó i que Deu lo tingi en el Cel.

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