viernes, 20 de febrero de 2009

PURA ECOLOGÍA LINGÜÍSTICA

El primer verbo de Pere Polo en su artículo del Última Hora “Defensors de la llengua” ya de por si me aterrorizó y siendo como es, normalización lingüística, mejor sería llamarlo fosilización, normalizar algo vivo es como matarlo, es retroceder, dejar en suspenso, en stambay. Es un off a la vista y poco natural además de inmoral. Seguro que engorda y aboba…
No me extraña que se estanque.

Las lenguas vivas no tienen complejos porque simplemente son lenguas y están vivas por su uso, una llave inglesa no tiene ningún complejo aunque la utilice un aragonés de Calatayud. Las lenguas son herramientas que solamente tenemos et controlamos los humanos y por ello están sometidas a una dinámica mutante y libre.

Existe eso que llamamos modos y costumbres, están la moda y la idiosincrasia, una más efímera y la otra enriqueciéndose a placer. Normalizar la moda no es fácil y normalizar la idiosincrasia una barbaridad.

El nuevo imperio lingüístico catalán está fuera de lugar en Baleares y Valencia porque sus idiosincrasias son diferentes, aunque se parezcan sus lenguas. Sustituir la forma vernácula por el llamado catalán estándar es matar la tradición autóctona y esa es la pretensión de la Normalización, pura política imperialista arrasando lo ibicenco en nuestro caso y por decreto ley con los dineros del Estado.

La lengua ibicenca se habla en la Isla porque es lo normal, es el modo y es la costumbre, no se habla más por las campañas de catalán en las escuelas ni por la llamada Normalización, se ha hablado siempre y se mantiene porque la mayoría de ibicencos viven en el campo, los payeses jamás dejaron de hablar su lengua y no creáis que les gustaba mucho que lo hablaran los ‘forasters’, ya usaban el castellano como herramienta general de comunicación con las otras gentes peninsulares, que curiosamente encasillaban como ‘murcianos’ y entre los cuales estaban incluidos los catalanes, por descontado.

Los españoles en esto de las lenguas somos muy brutos y sin embargo todas las lenguas peninsulares son comunes con el vasco como lengua más antigua de todas, el castellano sin dejar de ser romance tiene la misma fonética que el eusquera y tanto en las lenguas lusitanas como en las mediterráneas y más en el castellano se utilizan muchas palabras que tienen su traducción por el vascuence, lengua consecuencia de las ibéricas prerromanas, las mediterráneas y las lusitano galaicas son más latinas que el castellano que además está enriquecido por el árabe. Todos los pueblos que nos visitaron dejaron su impronta.

Es normal que la lengua común de España sea el castellano, ha crecido más y es eje de muchas naciones que lo comparten sin perder idiosincrasia. Es hermoso que un catalán se entienda hablando con un ibicenco y cada uno haciéndolo en su propia lengua pero siempre habrá matices desconocidos de propia cultura que la Normalización se puede cargar y eso ocurrirá cuando los payeses dejen de ser payeses, creo que va para largo y espero que el catalanismo no lo consiga.
El problema político catalanista que yo entiendo perfectamente al haber sido reprimida la lengua catalana injustamente por gobiernos españoles integristas y por monarquías de otros siglos anteriores, fue un problema en Cataluña que ya no tiene, lógicamente. En Ibiza jamás estuvo prohibido el ibicenco ni dejó de hablarse y todos los españoles, todos, estuvimos reprimidos por Franco y hasta por Carlos III, como los catalanes.

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